Barahona-.
Por David Santana.
La entrega de éste Liceo de Arte en Barahona, en el Gobierno de Danilo Medina, fue la burla más grande para la juventud de el arte, en Barahona.
El Liceo de Arte Ramón Oviedo, es una obra fuera de lugar,
que se debe reforzar.
Una estructura que no califica, en el sentido que se debió dar, se manejó como un liceo más, sin la condiciones que necesita un verdadero espacio para el arte.
"Un liceo de arte" se supone que debe tener un salón de eventos, varios talleres donde los artesanos y artistas de las diferentes menciones, puedan poner en practica la teoría, sin la necesidad de languidecer, debió estar equipado con los instrumentos musicales, herramientas artesanales y equipos para las diferentes menciones que se imparte allí, lo que que nunca, fue así.
"Un cascaron de huevo vació" fue lo que recibió Barahona, donde los profesores actualmente llevan las herramientas desde sus casas, donde después de siete años en la pándemia fue la primera vez que recibieron algunos instrumentos musicales.
Si tienen una tambora y la güira, dígame usted en donde la tocan?
Si tienen una madera que tallar, dígame usted donde la tallan?
Si tienen que ensayar una orquesta, dígame usted, donde la ensayan.
Si tienen que presentar una danza dígame usted, en que salón la bailan.
Si tienen una obra de arte que pintar dígame usted maestro Ramón Oviedo desde el mas allá, donde la pintan.
Una Imperfección total, como dice un viejo refrán; el traje no es de se mono.
El liceo de arte Ramón Oviedo, necesita un refuerzo, y necesita que los equipos necesarios estén en manos de esos jóvenes que hacen magias con lo poco que tienen, sin detenerse al éxito.
Hasta el momento los estudiantes utilizan varias veces el área del comedor del recinto para proyectar sus eventos, sin ningunas condiciones para tales fines.
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