WILLEMSTAD - Refineria di Korsou (RdK), el propietario de la refinería de Curazao, tiene "luz verde" para vender la empresa Propernyn. Se trata de una subsidiaria de la petrolera venezolana PdVSA. La terminal petrolera Bopec en Bonaire es parte de Propernyn, entre otras instalaciones.
Esto fue determinado por el Tribunal Supremo de los Países Bajos. La venta es el resultado de diversas incautaciones de activos de PdVSA, que debe más de 52 millones de dólares a RdK.
Estas deudas surgieron luego de que la empresa estatal venezolana no pagara el arrendamiento de la refinería en los últimos dos meses de 2019. PdVSA tampoco pagó las cuentas que quedaron pendientes por los servicios de Curacao Refinery Utilities (CRU).
El dueño de la refinería está lanzando una venta pública para monetizar los activos de PdVSA. Las ganancias de esta venta, dice RdK, serán para impulsar la continuidad de las operaciones de la refinería en Curazao.
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